Simman 3G Simulador para estudiantes de medicina
En ciertos ámbitos profesionales como la medicina o la aviación, entre otros, hacer practicas reales puede ser realmente peligroso. Los estudiantes de estas profesiones no pueden ponerse directamente a los mandos de un Boeing 747 de 70 metros de longitud, o bisturí en mano a realizar un trasplante de corazón.
Para estas complejas y largas tareas de aprendizaje se desarrollan, gracias a la tecnología más puntera, complejos simuladores que son capaces de recrear situaciones reales con una fidelidad realmente asombrosa. Concretamente, los estudiantes de Medicina disponen del Simman 3G, uno de los simuladores más avanzados en este campo.
Las características técnicas de este robot, desarrollado por la firma noruega Laedral, son realmente sorprendentes. Es capaz de simular un paciente con un nivel de realismo que llega a asustar. Habla, respira, suda, sangra, llora, tose, tiembla… Puede representar prácticamente cualquier síntoma o estado que pueda padecer un paciente real. Los estudiantes se enfrentarán a este simulador en el que todos los tratamientos son posibles: intubación, tubo de drenaje pleural… todas las técnicas de cuidados críticos pueden practicarse. Hasta se le pueden administrar tratamientos farmacológicos, y el artilugio reconocerá tanto el medicamento como la dosis utilizada.
Todo esto no es más que un claro ejemplo que nos hace ver cómo los simuladores son cada vez más importantes en la educación y el aprendizaje. También va en aumento su complejidad y semejanza a la realidad, por lo que las prácticas con éstos son equiparables a una vivencia real pero con la ventaja de que, por muchos errores que se cometan en estas fases, no habrá que lamentar ninguna desgracia.